Vista En: TVE-2, miércoles 7 de febrero de 1996.
Título Original: The Real X Files: America’s Psychic Spies.
Director: Bill Eagles.
Guión: Jim Schnabel. Género: Documental.
Música: [No hay compositor]. Fotografía: Richard Numeroff.
Decorados: [No hay decorador]. Vestuario: [No hay diseñador].
Productoras: Channel Four Productions, Discovery Channel y
Wall to Wall Televisión. Presupuesto: [Desconocido].
País: Reino Unido. Año: 1993. Duración: 60 minutos. Color y B/N.
Reparto:
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Personajes:
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Jim Schnabel
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Narrador
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Mel Riley
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Él mismo
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Stansfield Turner
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Él mismo
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Ed Thompson
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Él mismo
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John B. Alexander
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Él mismo
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Hal Puthoff
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Él mismo
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Ingo Swann
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Él mismo
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Keith Haray
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Él mismo
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Ed Dames
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Él mismo
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Lyn Buchanan
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Él mismo
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Linda Buchanan
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Ella misma
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Christine Dames
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Ella misma
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Enfebrecidos y dominados por la paranoia de
la Guerra Fría, a principios de los años 70 Estados Unidos se mete en un
proyecto secreto con el nombre de Testigos Lejanos, investigando y reclutando a
psíquicos y gente con capacidad extrasensorial para experimentos en los que
fuesen capaces de describir paisajes y localizaciones enemigas con el poder de
su mente.
Crítica: Rodado a rebufo de la serie de televisión
Expediente X [1993], pero al mismo tiempo desmarcándose de ella en su temática
principal, Bill Eagles debuta como director para contar la desclasificada
historia de un importante proyecto en las altas esferas del ejército de los
Estados Unidos, contando con el testimonio de algunos de sus implicados para
aclarar la importancia de tal empresa de percepción extrasensorial así como los
métodos utilizados para el cumplimiento de la misma (Puthoff, explicando cómo
le vino la idea de crear el programa y cómo logró que esto interesase el
Pentágono; los tests usados para probar a Ingo Swann, uno de los psíquicos y
sensitivos más importantes y famosos en la década de los 70; la aparición de ex
directores de la CIA y jefes del Estado Mayor, poniendo de relieve hasta qué
punto aquello era tomado en serio por la cúpula del poder estadounidense). Una
hora de duración de una historia digna de un guionista de la mejor ciencia
ficción al estilo de Steven Spielberg que, siendo real al 100%, luce un impecable
y estupendo acabado para ejercer las veces de ejemplo de la infame guerra
psíquica que se libraba entre la extinta URSS {Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas} y USA, que había nacido en los años 50 y que veinte años después
estaba en su máximo apogeo (la increíble precisión de Riley y de otros testigos
lejanos de describir paisajes y lugares a miles de kilómetros de distancia,
sentados en un sencillo cuarto en el interior del Pentágono: lo del Templo
Másico en la estación de tren de Alejandría es pasmoso en sus implicaciones; el
uso de reconocedores de imagen del ejército, al estar especialmente
sensibilizados en el asunto de imágenes; la curiosa referencia sobre la
kriptonita). Un documental dirigido y facturado con el sello de la excelencia,
que lanza una mirada al pasado para sacar a relucir una parte desconocida de
él. Realmente fascinante.
La
Puntilla: ¿Y luego hay
cretinos que niegan los fenómenos sobrenaturales, cuando los gobiernos del
mundo intentaban usarlos en su beneficio?.
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