Vista En: Cines Odeón (Corvera), domingo 12 de marzo de
2017.
Título Original: Gold.
Director: Stephen Gaghan.
Guión: Patrick Massett y John Zinman. Género: Drama.
Música: Daniel Pemberton. Fotografía: Robert Elswit y Beauchamp Fontaine.
Decorados: Carla Curry y Sophie Phillips. Vestuario: Danny Glicker.
Productoras: Black Bear Pictures, Boies/Schiller Film
Group, Hwy61 y Living Films. Presupuesto: ±20.000.000 $.
País: USA. Año: 2016. Duración: 120 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Matthew McConaughey
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Kenny Wells
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Édgar Ramírez
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Michael Acosta
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Bryce Dallas Howard
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Kay
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Joshua Harto
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Lloyd Stanton
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Timothy Simons
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Jeff Jackson
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Michael Landes
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Glen Binkert
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Corey Stoll
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Brian Woolf
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Toby Kebbell
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Paul Jennings
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Bruce Greenwood
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Mark Hancock
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Stacy Keach
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Clive Coleman
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Bill Camp
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Hollis Dresher
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Rachael Taylor
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Rachel Hill
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Argumento: Kenny Wells es un prospector minero
desesperado por un golpe de suerte que salve su empresa y a sus empleados de la
quiebra. Viajando a Indonesia para buscar a un explorador famoso llamado
Michael Acosta, juntos se lanzan a probar la teoría de este sobre un yacimiento
mineral gigantesco. Pero su hallazgo solo será el principio de sus problemas
para ambos.
Crítica: Libre versión de uno de los más sonados
escándalos financieros de mediados de los años 90 con el que Matthew
McConaughey hereda el estilo de Christian Bale en La Gran Estafa Americana
[David O. Russell, 2013] a fin de afear su aspecto para dar credibilidad a su
personaje, al lado de un siempre competente y carismático Edgar Ramirez y
acompañado de una irreconocible Bryce Dallas Howard, cuyos estilismos se bastan
y sobran para situar la trama en su contexto correcto (Kenny Wells, un prospector
de tercera generación pero sin el talento ni olfato de su padre y abuelo a la
hora de hacer negocio: su progresiva caída en barrena es meteórica; Acosta, un
paria de su gremio que cual Heinrich Schleimann y Troya solo busca demostrar
que su teoría es correcta: su confesión a Wells sobre su reputación es la
enésima prueba de su capacidad como actor; Kay, una mujer de clase obrera que
no acaba de ver con buenos ojos los métodos de su novio para vivir). Partiendo
de un hecho verídico pero llevándolo a su terreno, el largometraje da
suficiente peso a los secundarios para que estos brillen incluso en lo más
pequeño de su conjunto, haciendo que la película mejore y mucho por lo
equilibrado del ritmo, con un par de planos fantásticos (Wells, en su despacho,
solo y a oscuras, reseñando el desamparo de un hombre que lo está perdiendo
todo; Craig T. Nelson, cuya única escena sirve para eclipsar a McConaughey en
un suspiro: sencillamente magistral; las idas y venidas de Wells con Woolf y
Hancock, demostrando los cinismos de un mundillo donde la lealtad es de color
verde). Acometiendo un par de giros narrativos a los que no les falta ingenio,
Gold: La Gran Estafa es una película muy entretenida y a si mismo, un duelo de
titanes al más puro estilo Hollywood, dos idealistas enfrentados contra un
mundo de una avaricia desmedida. El discurso de Wells a Wolf sobre eso es una
auténtica gozada.
La Puntilla: Mucho cuidado con trabajar y currárselo para
hacer negocio. No faltará quien quiera hacer lo segundo sin pasar por lo
primero.
Mi
Valoración
★★★★★
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