Vista En: Cines Marta & María (Avilés), domingo 20
de noviembre de 2011.
Título Original: Melancholia.
Director: Lars Von Trier.
Guión: Lars Von Trier. Género: Drama.
Música: [No hay compositor]. Fotografía: Manuel Alberto Claro.
Decorados: [Desconocido]. Vestuario: Manon Rasmussen.
Productoras: Zentropa Entertainments, Memfis Film,
Zentropa International, Sweden, Slot Machine, Liberator Productions, Zentropa
International Köln, Film i Väst, Danmarks Radio, Arte France Cinéma, Sveriges
Television, Centre National du Cinéma et de L'image Animée, CinéCinéma, Canal+,
Nordisk Film Distribution, Det Danske Filminstitut, Eurimages, Nordisk Film-
& TV-Fond, Swedish Film Institute, Edition Video y Filmstiftung
Nordrhein-Westfalen.
Presupuesto: ±7.400.000 $.
Países: Dinamarca, Suiza, Francia y Alemania. Año: 2011. Duración: 135 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Kirsten Dunst
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Justine
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Charlotte Gainsbourg
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Claire
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Kiefer Sutherland
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John
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Alexander Skarsgård
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Michael
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John Hurt
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Dexter
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Stellan Skarsgård
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Jack
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Charlotte Rampling
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Gaby
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Brady Corbet
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Tim
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Cameron Spurr
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Leo
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Udo Kier
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Planificador de bodas
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James Cagnard
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Padre de Michael
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Deborah Fronko
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Madre de Michael
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Justine es una chica que en el día de su boda
comienza a sentir síntomas de una depresión, lo que causa consternación en
Michael, el novio, así como en Claire, la hermana de Justine, y en su marido John.
Con la boda anulada, Justine se sumerge en una fuerte obsesión con el
descubrimiento de Melancolía, un planeta que podría amenazar la supervivencia
de la Tierra.
Crítica: Volviendo al tema de la depresión como
hiciese en Anticristo [2009], Lars Von Trier filma con una excesiva sobriedad
una película extraña que se sitúa a medio camino entre la antítesis de
Armageddon [Michael Bay, 1998] y un melodrama fin de semana, partido en dos
mitades bien diferenciadas y en el que sobresale por derecho una impresionante
Kirsten Dunst que eclipsa al resto de compañeros (sus miradas durante su boda
con Michael, encantador Alexander Skarsgård: ¿te casas con un tiarrón hecho y
derecho que además es buena gente...y vas y te deprimes?; la angustia de
Claire, contemplando sin poder evitarlo como su hermana se convierte en una
sombra de ella misma; el momento en el que, a la luz de la luna, Justine decide
tumbarse a mirar a Melancolía...sin ropa: primera vez en su carrera que no solo
desnuda su alma, si no también su cuerpo). Elegante en la puesta en escena pero
amarga como el vinagre, Melancolía es un descenso a los infiernos personales
con algún que otro momento inspirado en su sencillez, y un reparto sencillo
pero adecuado a sus papeles, que permite avanzar la historia sin demasiadas
estridencias (el truco para saber si Melancolía se acerca o se aleja a la
Tierra: pocas veces un palo y un hilo de metal hecho círculo tuvieron tanta
relevancia; el inicio, con una danza loca de planetas que casi parece un sueño
por la forma en que se rueda; su banda sonora, prescindiendo de compositores actuales
para poner música del Tristán e Isolda de Richard Wagner: muy adecuada). Una
película que guardando cierta coherencia y alejándose de historias redentoras
(¿acaso la raza humana puede evitar que un planeta choque contra otro?),
asemeja la depresión a un choque de planetas (o hermanas), contando una muy
personal y particular visión del mundo. Más rara que un perro verde con ojos
morados, ideal para los más incondicionales de su director. Para el
resto...algo sosita.
La Puntilla: Dos horas de peli...y todo lo que la gente
recordará es a Kirsten Dunst en pelota picada (normal, con lo tremenda que está
la tía).
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