“Criticaen25” es un punto de encuentro para todos los cinefilios, habitantes del séptimo planeta del sistema solar de las artes. Una propuesta amena y divertida a la par que abierta al debate y a la reflexión en la que, tan diariamente como sea posible, se irán comentando películas de todos los tiempos, con independencia de su género o fama. Un lugar en donde relajarse y disfrutar de un rato agradable en buena compañía.

Trascendiendo lo Visible para Llegar a lo Invisible

TRASCENDIENDO LO VISIBLE PARA LLEGAR A LO INVISIBLE


 ¿Qué podrían tener en común dos nombres tan dispares como Ziggy Stardust y Nikola Tesla?. Pues a David Robert Jones, nombre de pila de David Bowie. Un hombre que durante toda su vida, en una de esas digna de un documental biográfico de la CBS (y de hecho en 2002 sí que dedicó una hora a su figura), buscó romper con lo establecido para crear algo diferente. Y precisamente, en una época como los años 70, donde contracultura y ruptura se hicieron el eslogan de una generación más rebelde y contestataria que nunca, no es de extrañar, por tanto, que Bowie calase en aquella juventud de una forma tan profunda. Como con todas las demás cosas, hace falta analizar el contexto de un hecho para entender de verdad ese hecho. Más allá del Bowie cantante y artista, deseo reivindicar al Bowie actor, al camaleón humano con esos ojos tan peculiares, convertidos en icono indiscutible del siglo XX, que quiso dejar su huella cinematográfica. Una veintena de películas que comenzaron con la ya legendaria El Hombre que Cayó a la Tierra [Nicholas Roeg, 1972] y que se acabaron con School Rock Band [Todd Graff, 2009]. Pero, retrocediendo tres años y dos películas, es ahí donde ese visionario de nombre Christopher Nolan el que a mis ojos da su último papel de cine, y que es digno de mencionar: el también visionario e inventor Nikola Tesla. Porque, en ese eterno juego de la vida imita al cine y viceversa, nada mejor que un genio para ser el alter ego de otro genio. Y en ese duelo de titanes entre Christian ‘Batman’ Bale y Hugh ‘Lobezno’ Jackman, el que termina ganando la partida es un David Bowie en estado de gracia. Tal como rezaba Dumont en TRON [Steven Lisberger, 1982]«todo lo que es visible debe desarrollarse por si mismo y llegar hasta el reino de lo invisible». El hombre se va al reino de lo invisible, la leyenda se queda en el visible. Música. Cine. Arte. Cultura. Rebelde. Icono. Bowie. 

 Nº De Serie: NC/TCM/00006. Escrito Por: The Cineman.
 Publicado El: Martes, 12 de enero de 2016.

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David Bowie
(8 de enero de 1947; 11 de enero de 2016)
Gracias por hacernos pensar si había vida en Marte

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