Vista En: TCM, martes 13 de septiembre de 2016.
Título Original: Sweeney Tood: The Demon Barker of Fleet
Street.
Director: Tim Burton.
Guión: John Logan, basado en el musical homónimo de
Hugh Wheeler y adaptado por Christopher
Bond, estrenado en 1979, inspirado por el relato original de James Malcolm
Rymer y Thomas Peckett Prest, publicado en 1846. Género: Musical.
Música: [No hay compositor]. Fotografía: Dariusz Wolski.
Decorados: Francesca Lo Schiavo. Vestuario: Colleen Atwood.
Productoras: Warner Bros., DreamWorks Pictures,
Parkes+MacDonald Image Nation, The Zanuck Company y Tim Burton Productions.
Presupuesto: ±50.000.000 $.
Países: USA y Reino Unido. Año: 2007. Duración: 116 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Johnny Depp
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Sweeney Todd
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Helena Bonham Carter
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Sra. Lovett
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Alan Rickman
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Juez Turpin
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Timothy Spall
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Beadle
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Sacha Baron Cohen
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Pirelli
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Jamie Campbell Bower
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Anthony
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Laura Michelle Kelly
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Lucy/Pordiosera
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Jayne Wisener
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Johanna
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Edward Sanders
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Toby
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Philip Philmar
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Sr. Fogg
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Harry Taylor
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Sr. Lovett
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Johnny Depp
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Sweeney Todd
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Después de 15 años, Benjamin Barker regresa a
Londres bajo el nombre de Sweeney Todd, con el propósito de ajusticiar al juez
Turpin, quien mató a su esposa y crió a su hija como si fuese suya. En la calle
Fleet conoce a la Sra. Lovett, con quien da comienza a un reguero de muertes, a
la espera de encontrar el momento de adecuado de asesinar al propio Turpin.
Crítica: Enésima versión del clásico de mediados del
siglo XIX en la que Tim Burton saca a relucir toda su agobiante y abigarrada
atmósfera tétrica como ya lo había hecho en Sleepy Hollow [1999], en que Johnny
Depp compone una actuación magnífica al lado de una aún mejor Helena
Bonham-Carter, ambos metidos en una trama de miseria, tragedia y pasiones con
muchas canciones de por medio y otro tanto de hemoglobina (el inicio, en el que
Todd canta las ‘virtudes’ y cualidades de Londres, notándose el amargor por su
tormentoso pasado; la primera escena de la Sra. Lovett, teniendo una química
con Depp que nunca deja de maravillar; Todd, afeitando al Juez Turpin mientras
ambos cantan sobre las chicas perfectas: un momento de complicidad pero también
de una tensión más que evidente). Interesante en detalles como la aparición de
un más contenido y menos zafio Sacha Baron Cohen, lejos de personajes zafios y
vulgares como Ali G, y otros más viscerales y repugnantes, Burton se recrea en
el ambiente gótico más victoriano a base de un ambiente malsano de necesidad,
donde ambición y corrupción estaban a la orden del día (Todd, despachando a
golpe de navaja a sus clientes solo para que la Sra. Lovett les remate de un
modo muy culinario; ésta, narrando en flashback el destino de la esposa de Todd
así como el de su hija, desagradable hasta niveles de una total nausea; Turpin,
impasible dictando un ahorcamiento, apasionado en sus deseos hacia una angelical
Johanna). Una historia sobre amores perdidos y de obsesivas venganzas a base de
cuchillas, idóneo en vestuarios y maquillajes (la sordidez de las calles y lo
demacrado de sus personajes; los intentos de la Sra. Lovett por enamorar a un
sombrío Todd), en que el final, conservando el tono pesimista con que empieza,
da un cierre memorable a su historia que remata un trabajo asfixiante y
perverso, pero subyugante de todas todas.
La Puntilla: Las venganzas ciegas siempre se cobran las
víctimas que menos deseamos dañar. Es lo que tiene el deseo irrefrenable de
matar.
